La nueva máquina

Después de un mes escaso de haber vendido mi querida Deauville, me puse a tratar de encontrar lo que andaba buscando: un scooter de buenas prestaciones, que fuera capaz de hacerme mover cómodamente entre el tráfico de Madrid, y al mismo tiempo susceptible de ser una compañera de viaje fiable, en caso de salir con otros moteros a hacer turismo.

Despues de analizar varias opciones, que no voy a entrar a detallar, mis pasos se orientaron hacia los modelos Suzuki, sobre todo por la fiabilidad de una gran marca, cuyos productos estan suficientemente probados. Dada mi procedencia de un modelo de 650 cc, parecia que lo mas apropiado por polivalencia, capacidad de carga, peso y prestaciones, era la Burgman 400 cc. La Burgman de 650cc, en especial el modelo Executive, es una maravilla que me impresionó nada mas verla, pero si hubiera querido una 650, me hubiera quedado con mi Deauville..... !!!

Y la 400 fue la maquina elegida. Quedaba elegir color y acabado, y dado en en 2011 solamente se vendió en color blanco, negro y cereza, mi elección fué esta última. Había un pequeño inconveniente: el modelo color cereza no se vendía equipado con ABS, por lo que las opciones eran blanco o negro. Finalmente, sacrifiqué el ABS, porque no me gustaba ni blanca ni negra. Asi que aqui está.

Lo cierto es que tiene una estampa muy bonita, este modelo 2011 viene con unos acabados y unos detalles de los mas trabajado. Los japoneses se han esmerado....

Viene equipada en el tablero de instrumentos con velocimetro, cuentavueltas, cuentakilometros total y dos parciales, termometro de temperatura ambiente y avisador de revisión periódica, ademas de luces de aviso de freno de mano, intermitentes, luz de carretera, etc.

El detalle del freno de mano es importante. Acostumbrado a otras motos y otros scooter, en los que nunca habia visto ese accesorio, me pareció que no tendría una utilidad especial, aparte de la ponerlo una vez estacionada la moto. Pero me equivocaba. Lo cierto es que resulta de lo mas util en semaforos, salidas en cuesta, e incluso cuando llego a la puerta de mi garaje, que esta tambien en cuesta, y tengo que quitarme los guantes para buscar el mando de apertura de la puerta. Ahí es donde está buena parte de su utilidad. Ahora es de agradecer, porque los casi 200 kilos son muchos......

Tambien los grupos opticos, tanto delanteros como traseros están renovados, con un brillo y un diseño especial que refracta la luz de forma que se aproveche todo el haz en su totalidad, lo que supone mayor luminosidad con menos consumo.

Mi Burgman 400 y yo

No hay que olvidar el confort del pasajero, que se coloca en una envidiable situacion elevada, de tal forma que puede mirar al frente por encima del casco del piloto, con un confortable y mullido asiento, complementado con dos asas laterales de sujeción y un cómodo respaldo (opcional, eso sí) que hacen del puesto de acompañante un lugar mas acogedor que en la mayoria de las motos de su segmento.

En resumen, una excelente moto, que espero me de muchas satisfacciones junto con mis amigos moteros, y que tengo la esperanza de poder compartir en este blog.